Autora: Imelda Chaves Peraza
Ingredientes
- Palmito
- Tocino
- Posta de cerdo
- Cebolla
- Chile Dulce
- Ajo
- Culantro coyote
- Aceite
- Aceite
- Pimienta negra
Cantidades
- 2 kilos, la parte más tierna
- 1 kilo
- 1/2 kilo de posta
- 2 picadas
- 1/2 picado
- 1 cabeza
- 1 rollo
- 1/2 taza
- 1 cucharada y 1/2
- Al gusto
Preparación
- Escoger bien el palmito tierno, la parte del centro del mismo, picarlo en cuadritos finos.
- Después, picar todos los olores y la carne, el tocino también en forma bien fina.
- Una vez que tiene todo bien picado y listo, empezamos en una olla que sea de hierro o loza a freír el tocino con sus olores bien cocinado.
- Agregamos la carne y a fuego lento, pueden escoger el tipo de cocina sea de gas, eléctrica o en el fogón de la abuela a la leña.
- Con el fuego muy muy lento después agregamos el palmito y empezamos a sazonarlo hasta darle el punto de cocción
- Se le agrega de último el culantro coyote y a disfrutarlo con un par de tortillas.
Historia de la receta
De la historia de la receta, doña Imelda nos cuenta lo siguiente “bueno, yo la aprendí aquí, en la comunidad de Bijagual hace poco. Yo no comía esta receta de picadillo, sin embargo, ya la he preparado un par de veces y me gustó. Me la enseñó una señora de acá del pueblo, ella tiene muchos años de prepararla, de hecho es mi compañera del concurso”.
La compañera de doña Imelda, doña Inés, aprendió esta receta desde muy joven. La mamá de doña Inés también la hacía, es por eso que toda la vida ella la ha hecho en casa, para eventos especiales, para turnos de la Iglesia y para la Asociación de Desarrollo del Pueblo. Al respecto, indica doña Imelda “así que es muy importante rescatar que ella si sabe sazonas un buen picadillo”
Sobre alguna anécdota relacionada con esta receta, nos menciona doña Imelda, “cuenta un señor de la comunidad, que no ha vuelto a comer un picadillo que la mamá de él preparaba -ella ya no está- pero él recuerda que lo hacía con leche y lo comían con tortillas, apenas recuerda eso. Y que ellos en aquel entonces comían palmito de mantequilla, que era sacado de una palmita delgada, sin embargo, larga y que sabía a pura mantequilla y era amarillo.

En relación con el acceso a los ingredientes, dice doña Imelda que sí es un poco difícil, pero siempre hay varios tipos de palmitos para elaborar la receta y si encontramos en estas zonas de Puriscal. Nos cuenta además que, hoy por hoy en muchas de nuestras familias preparan la receta, lo que va a permitir que se mantenga la tradición por muchos años más.