Skip to content

Chorreadas en cafetales

Alejandrina Cascante

Una historia de los cafetales de Turrubares, San José:

Cortaba café en la hacienda de Amancio Jiménez con mi mamá y ahí nos pagaban por cajuela, 250 pesos por cajuela ¡una cochinada! Cortábamos café desde la mañana hasta las 3 de la tarde, 7 a 3. Para comer llevábamos pinto, frijoles o algo más. Desayunábamos y almorzamos ahí en los cafetales.

A veces salimos a comer, comprábamos en la pulpería, sardinas o atunes. Ahí tomábamos hasta café, a veces llevábamos chorreadas para acompañarlo. Yo iba a cortar café de los 7 años. Llenaba la canasta sola, ¡a veces le echaba hasta hojas! Cogía 4 cajuelas en un día, mil pesos por día. Nunca me encontré un bicho en los cafetales, pero pequeña andaba cogiendo frijoles y me picó una culebra café en el dedo y me lo torció. Metí la mano en una cueva y me mordió. Me llevaron al hospital, tenía 13 años

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *